¡La petición de implicaciones políticas serias!
El “Padre Nuestro” (Mateo 6, 5-15) que rezamos los cristianos es la oración que Jesús nos enseñó. Supone expresiones de saludo y adoración, y luego siete peticiones. El “venga a nosotros tu Reino” es la petición más importante. Escudriñémosla.
El “venga a nosotros tu Reino” constituye la más importante y fundamental de las peticiones, pues nos remite al “Reino”. ¿Qué es el Reino? Según San Pablo en su carta a los Romanos (14, 17) “el reino de Dios no es cuestión de comer o beber determinadas cosas, sino de vivir en justicia, paz y alegría por medio del Espíritu Santo”.
El Reino es Cristo mismo y todo lo que Él implica: orden, justicia, libertad, paz y alegría, pero no sólo en el ámbito personal, sino también en el ámbito social. De ahí la doctrina de la realeza social de Cristo, la cual enseña a un Cristo gobernante de Su Reino, con normas y leyes para la vida social.
Lamentablemente, los cristianos hemos sido mal educados en las enseñanzas y preceptos bíblicos. Repetimos oraciones de memoria sin reparar en su contenido, significado real e implicaciones últimas. El haber des-politizado el Evangelio y limitado únicamente a la esfera de la salvación personal nos alejó de las normas y preceptos bíblicos del buen orden social, lo cual también es parte del Reino. El Padre Nuestro termina con la siguiente doxología (oración de alabanza): “Porque tuyo es el Reino, el poder y la gloria por siempre. Amén”, cerrando así perfectamente la oración.
¡La próxima vez que reces el Padre Nuestro, hazlo conscientemente y de forma completa; repara en esta petición y pide a Dios sabiduría y coraje para ponerla en práctica!
Lee mis columnas sobre política cristiana aquí.
----
Guatemala, 27 de marzo de 2024
Comments