El rechazo de la verdad

No caigamos en la trampa de politiqueros de izquierda y derechas malas. 

Afirma el politólogo argentino Alberto Mansueti: “La mentira goza de grandes ventajas frente a la verdad. La mentira se dice rápido, se repite miles de veces, y se difunde velozmente. La verdad en cambio necesita investigación y estudio de los hechos y realidades, más allá del opinionismo y la comentocracia; lo cual lleva tiempo, y no todo el mundo puede seguir el hilo de los argumentos. Por eso el embustero gana, al menos a corto/mediano plazo, y pierde quien diga la verdad. La vida es así, no siempre es justa, desde que el pecado entró en el mundo; por cierto: de la mano de la mentira. Y no olvide nunca que la mentira es hermana gemela de la ignorancia”.

Hoy en día, en Occidente, desde Ankara,Turquía hasta Alaska, Estados Unidos, pasando por Guatemala, en todas las democracias “liberales”, prevalece la politiquería y por tanto la manía de ganar elecciones a golpe de mentiras, tales como: “el dinero alcanza si nadie se lo roba”, “el problema es la corrupción”, “en Guatemala aún se pagan pocos impuestos” o “la deuda pública es baja”. 

Sin estudio es fácil creerse estas y muchas otras mentiras. El politiquero, de izquierdas y derechas malas, se aprovecha de esa ignorancia y manipula la voluntad de la gente con emotivos discursos y políticas populistas. El político de derecha buena, en cambio, dice la verdad, aún y cuando ello le cueste el rechazo.

Su compromiso es con la verdad porque no entiende la política como el “arte de lo posible” sino como “el arte de hacer posible lo que es justo, correcto y necesario, por medios pacíficos, en orden al bien común”. 

Dediquemos tiempo al estudio de la buena política, la de signo fusionista. ¡Comienza a estudiar ahora! 

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Julio 9, 2025